lunes, 12 de octubre de 2009

Disuelto en ese sonido

Hacía mucho que no tenía la oportunidad de viajar sin manejar por la ciudad, y hoy después de mucho tiempo me convertí en turista en mi propia tierra por un rato, lo único que me acompañaba además de las presencia de los demás, era la música en mis oídos... me dí cuenta de que algo que podría ser tedioso de hacer como viajar por esta ciudad atestada y con un poco de mala onda, cambia a un pequeño encuentro conmigo mismo, que me hace disfrutar de mi propia compania, y todo eso gracias a la música... con la ciudad moviendose coreograficamente alrededor mío.
Disfrutar de estas simples cosas es solo un poco de lo que le da sabor a la existencia nada mas que eso... mas que nada, solo un poco.
Por eso, solo por eso... esta vez le escribí a la música...

¨Mucho mas que nada¨

Aún si fuera un cielo de papel dibuja sobre mi tus alas, o si fuera un mar de vanidades dame tu profundidad, porque si fuera tierra de nadie te pediría una y mil veces que escribas tu nombre sobre mi... pero se que ahora soy una montaña cubierta de nubes... devuélveme el sol...
Es la brisa ligera la que atormenta mi adiós, y no se porque el olor de esta primavera presagia mis inviernos... y estoy ciego, déjame ver por tus ojos solo un rato, a ver si todo tiene el mismo color... si todo termina y vuelve a cero. A ver si cero es nada, porque curiosamente solo necesito uno... solo uno y nada mas.
Si soy un sueño, dame realidad... si soy un poco dame un  poco mas, porque la cantidad es lo de menos, solo queda esperar y nada mas... mas que nada... solo un poco... un poco mas. Y esta de mas de mas decir ya nada.
Porque si soy los ojos, dame tu mirada... porque sos mi musa y yo te doy mis palabras, como el infinito le da dimensión al universo y algo mas... mas que nada... solo un poco... un poco mas.